Es un duelo, es una pérdida y las pérdidas nos afectan emocionalmente, por lo cual un acompañamiento resulta reconfortante y necesario. En algunos países hay centros que ofrecen apoyo para el duelo migratorio. Este proceso de cerrar una etapa de vida, decir adiós a lo conocido y enfrentarte a nuevas costumbres, olores, sabores, paisajes e incluso, idiomas, precisa orientación especializada.
Todos nuestros afectos nos afectan y al irnos de nuestro país de origen, dejamos mucho atrás, aunque estemos llenos de ilusión y expectativas. Así que no esperemos a que este adiós se convierta en pesar, aprendamos a cerrar ciclos y solicitemos apoyo para integrarnos, con pausa y sensatez, a las nuevas circunstancias vitales.
El tiempo es relativo, es intangible y fluye en función de tus necesidades y mis recursos. Hablemos entonces de nosotros y de nuestro tiempo. Si deseas una solución rápida y ello es factible preservando, claro está, tu psique e integridad emocional y respetando siempre los principios éticos, así lo haremos. Tal vez solos, tal vez pidiendo apoyo de otros profesionales, colaboración de algunos de tu entorno, pero lo haremos. Para eso estamos.
Hay personas que buscan soluciones, otras buscan respuestas, otras necesitan revisiones, algunas requieren saber más de sí mismos… todos somos personas que buscamos sentirnos mejor con nosotros mismos, en paz y armonía, todos merecemos respeto y luz en el camino que elegimos vivir.
Es un duelo, es una pérdida y las pérdidas nos afectan emocionalmente, por lo cual un acompañamiento resulta reconfortante y necesario. En algunos países hay centros que ofrecen apoyo para el duelo migratorio. Este proceso de cerrar una etapa de vida, decir adiós a lo conocido y enfrentarte a nuevas costumbres, olores, sabores, paisajes e incluso, idiomas, precisa orientación especializada.
Todos nuestros afectos nos afectan y al irnos de nuestro país de origen, dejamos mucho atrás, aunque estemos llenos de ilusión y expectativas. Así que no esperemos a que este adiós se convierta en pesar, aprendamos a cerrar ciclos y solicitemos apoyo para integrarnos, con pausa y sensatez, a las nuevas circunstancias vitales.
La evaluación psicológica es un proceso sistemático y riguroso que se utiliza para obtener información relevante y objetiva sobre la persona que está siendo evaluada, con el fin de comprender su conducta, sus emociones, sus pensamientos y su funcionamiento psicológico en general.
La evaluación psicológica se utiliza con diversas finalidades, como por ejemplo, diagnosticar trastornos psicológicos, establecer el pronóstico de un tratamiento, evaluar la capacidad cognitiva o intelectual de una persona, determinar la idoneidad para un trabajo o puesto laboral, entre otras.
La evaluación psicológica puede incluir una variedad de técnicas e instrumentos, como entrevistas clínicas, cuestionarios, pruebas de personalidad, tests psicométricos, observaciones conductuales, entre otros. Cada técnica se utiliza de manera específica y se adapta a las necesidades de la persona que está siendo evaluada.
En resumen, la evaluación psicológica es un proceso fundamental para el diseño y la implementación de un tratamiento psicológico exitoso, ya que permite una comprensión profunda y objetiva de la persona que está siendo evaluada, y proporciona información relevante para la toma de decisiones clínicas y terapéuticas.
El tiempo es relativo, es intangible y fluye en función de tus necesidades y mis recursos. Hablemos entonces de nosotros y de nuestro tiempo. Si deseas una solución rápida y ello es factible preservando, claro está, tu psique e integridad emocional y respetando siempre los principios éticos, así lo haremos. Tal vez solos, tal vez pidiendo apoyo de otros profesionales, colaboración de algunos de tu entorno, pero lo haremos. Para eso estamos.
Hay personas que buscan soluciones, otras buscan respuestas, otras necesitan revisiones, algunas requieren saber más de sí mismos… todos somos personas que buscamos sentirnos mejor con nosotros mismos, en paz y armonía, todos merecemos respeto y luz en el camino que elegimos vivir.
Es un duelo, es una pérdida y las pérdidas nos afectan emocionalmente, por lo cual un acompañamiento resulta reconfortante y necesario. En algunos países hay centros que ofrecen apoyo para el duelo migratorio. Este proceso de cerrar una etapa de vida, decir adiós a lo conocido y enfrentarte a nuevas costumbres, olores, sabores, paisajes e incluso, idiomas, precisa orientación especializada.
Todos nuestros afectos nos afectan y al irnos de nuestro país de origen, dejamos mucho atrás, aunque estemos llenos de ilusión y expectativas. Así que no esperemos a que este adiós se convierta en pesar, aprendamos a cerrar ciclos y solicitemos apoyo para integrarnos, con pausa y sensatez, a las nuevas circunstancias vitales.